lunes, 18 de enero de 2016

VIAJE A MOTAUROS 2016

¿Que afición a viajar en moto hay que tener para salir a las 8:00 de la mañana, en pleno mes de Enero, con el termómetro petrificado en -3ºC y con dirección a un lugar aún más frío geográficamente hablando?

Eso iba pensando yo mientras me dirigía a Guadarrama, lugar donde había quedado con mi amigo Chema y otros 8 locos más que son capaces de montar en moto todo el año haga el tiempo que haga.

El bueno de Chema nos había propuesto vía wassap hacer un viaje relámpago a Tordesillas, para disfrutar del ambiente motero propio de la Concentración Motauros 2016, y ya de paso sentarnos alrededor de una buena mesa y degustar los productos típicos de la zona, al tiempo que hablábamos de nuevos viajes para este año que empieza.


Por el camino me encuentro a Chema y los dos juntos llegamos al Bar Ficha desde donde habíamos quedado para salir. Mientras va llegando el resto del grupo me pido un café con leche y una porra para ir calentando el cuerpo que el día se presenta muy duro.


Daba pena salir del bar con la "rasca" que hacía fuera, pero la idea era llegar a Tordesillas y todavía nos quedaba mucho camino.


Subimos sin problemas el Puerto del León, en la cima el termómetro marca 0ºC, ni frío ni calor. Empezamos a ver muchas motos que van en nuestra misma dirección, esto se anima.

El tramo hasta Adanero es como viajar por la estepa rusa, los campos totalmente blancos, la helada nocturna ha sido de campeonato, mejor no mirar mucho el termómetro porque duda en elegir pararse en los -3ºC o -4ºC.
Voy con los puños calefactables a toda mecha, pienso en el conocido dicho: "agarrarse a un clavo ardiendo" pues así voy yo y sin intención de soltarme hasta que los guantes salgan ardiendo.

Antes de tomar la autovía hacemos otra parada para estirar las piernas y pasar por el baño, porque el frío está directamente relacionado con el número de veces en que entran ganas de hacer pis.



Los kilómetros que nos quedan hasta Tordesillas se nos pasan en un suspiro, Chema nos lleva a buena velocidad para que el frío no nos coja.

Aparcamos justo al lado de la puerta de entrada y hacemos la foto de rigor.



Teníamos intención de dar un paseo por el interior de la acampada pero cuando nos informaron de que había que soltar 25€ por barba decidimos que el paseo nos lo dábamos por las afueras y los euros los empleamos de mejor forma que regalándoselos a la organización.
Para alguien que venga a pasar todo el fin de semana y se traiga la tienda de campaña a cuestas le puede compensar pagar ese precio, pero nosotros ya somos "mayores" para pasar la noche de acampada.


El día ha quedado despejado, ni siquiera hay esa niebla que la mayoría de veces nos acompaña cuando venimos por aquí en estas fechas. Con toda la ropa que llevamos, equipados hasta los ojos para no pasar mucho frío, ahora pasamos hasta calor y además nos tomamos un caldito caliente para calentarnos más aun.



Unas fotos a Tordesillas, unas cervezas en el restaurante junto al puente que cruza el río Duero, y otra vez a las motos que el gusanillo en el estómago empieza a protestar.




Una procesión constante de motos entre la acampada y el centro de Tordesillas.


El polémico Toro de la Vega tiene su estatua a la entrada del pueblo.


La comida la tenemos reservada en Arevalo, su imponente castillo, morada de los Reyes Católicos, nos sirve de fondo para una foto de grupo.



Localizamos el restaurante y no tardamos en ponernos cómodos para recibir a la especialidad de la casa.


Todos a la mesa con cara de hambre


Y el cochinillo en unos casos o el lechazo en otros, acompañado de una ensalada, hicieron las delicias de todos y nos supieron a gloria bendita.


Por supuesto, el flan de postre tampoco me lo podía perder


Y no me queda mucho más que comentar, el viaje de vuelta fue un paseo triunfal: corto, sin frío, con buen tiempo y tomando con calma las curvas del Puerto del León porque la humedad en la carretera hacía delicado tomar con confianza las curvas.

Buen día, buena ruta, buena gente y buena mesa, las 4 B's se unieron en esta primera ruta motera del año.

Hasta pronto.